Escribo y mis neuronas revolotean. Entre los disparos de tinta que desborda mi tórax, salpicando el escritorio, con palabras en busca de tus ojos.
Luces que alumbraban a estos pies que se deslizaban sobre aquel asfalto, que recorrían en busca de los sueños una mente desquiciada, tras desabrochar tu blusa.
Falta oxígeno entre tanto ruido, la gangrena del tiempo esta pudriendo las hojas de aquella libreta; donde trataba en vano, de tallar tu desnudez.